La angustia me come por dentro, no se qué era mejor, saber o no saber... La información que tengo ahora en mis manos es más dolorosa que el propio conflicto de no caminar...
Mis días han sido días fugaces, incómodos y llenos de lágrimas. Los doctores solo coinciden en una cosa: CIRUGÍA.
La palabra es tan fuerte de asimilar, que aun no consigo decirlo sin lamentarme, sin soltar unas lágrimas...
Me siento de papel... Tan frágil y tan inútil...
No se cuál es la lección que debo aprender de esta situación, sólo se que debo de ser lo más fuerte que pueda...
Debo resistir las ganas de perder la cordura... No por mi... Por mi Feli que a diario se desvive por mi, por este hombre hermoso que ha evitado mostrarme su preocupación y me hace reír aunque la situación sea dolorosa...
No tengo más que agradecer... Mama y el han sido lo que me da fuerza, lo que me dice que esto no va a vencerme...
Así qué no tengo otra, las cosas no van a cambiar si cierro los ojos y aparento no existir...
Los días pasan, y nadie me dijo que esta vida mía sería fácil...
Tan sólo es una prueba más...